La expresión «Organización Inteligente» es un término acuñado por el renombrado economista, pedagogo y autor estadounidense Peter Senge, conocido principalmente por su trabajo en el campo del desarrollo organizacional y por ser autor del renombrado libro La Quinta Disciplina. En él introduce la idea de la organización como un sistema y destaca la importancia del aprendizaje en equipo y el pensamiento sistémico.
Para poder enmarcar la propuesta del artículo, Peter Senge describe una «Organización Inteligente» como aquella que engloba estas cinco características en una propuesta poderosa. Cuando ellas se convierten en disciplinas a aprender por cada miembro de la organización, comienza el desafío:
Dominio personal: Cuando una persona logra desarrollarse integralmente y es capaz de conservar la calma en momentos de crisis, confía en sí mismo, desarrolla la capacidad de soñar, practica el desapego, es capaz arriesgarse por lo que le importa, es independiente, humilde, íntegro, compasivo y propenso al perdón, se podría decir que ha logrado el dominio personal
Modelos mentales: Un individuo que es capaz de examinar y desafiar y las creencias y suposiciones más fuertemente arraigadas en su vida, es capaz de cambiar su forma de pensar y actuar; y se hace merecedor de pertenecer a una organización inteligente
Visión compartida: Cuando una organización logra que sus miembros se alineen frente a esa «imagen del futuro soñado» propuesta, pueden conseguir que sus miembros estén dispuestos a convertir esa propuesta en propia y hacer todo lo posible para que se logre, no porque deban hacerlo, sino porque lo desean personalmente
Aprendizaje en equipo: Cuando se propicia el no buscar la respuesta correcta sino conseguir la pregunta adecuada. Cuando la sinergia entre los miembros es un hábito. Cuando el diálogo y la discusión abierta para resolver problemas y generar nuevas ideas es la costumbre, entonces todos estamos aprendiendo
Pensamiento sistémico: No por estar de última es la menos importante. ¡Todo lo contrario! No por casualidad es el «leitmotiv» del libro de Senge.
Cuando concientizamos el hecho de que todo está interconectado y que las organizaciones no son la excepción, comprendemos que las decisiones y acciones en una parte de ella afectan a las otras.
Pensar sistemáticamente es concientizar que el mundo está «ligado por tramas invisibles de actos interrelacionados, que a menudo tardan años en exhibir plenamente sus efectos mutuos».
En resumen, una «Organización Inteligente» es aquella que se entrena para aprender de su entorno, se adapta continuamente y evoluciona; y donde todos sus miembros están comprometidos con el aprendizaje, la mejora continua y el desarrollo compartido.
Una organización de estas características, no busca simplemente sobrevivir en el mercado. En su lugar, busca el crecimiento de los individuos que la integran porque la idea es prosperar y encontrar nuevas maneras de ser efectivos y eficientes.
Por eso, este tipo de organización exige la presencia de un nuevo líder: lejos de ser el «protagonista», el líder deberá ser el «diseñador-integrador», el «moderador del proceso», el «inspirador», el que estará «detrás de cámaras».
Debe ser aquel que permita y propicie que sus integrantes aprendan y que ese aprendizaje haga que expanda su mente para comprender las «tramas invisibles de actos interrelacionados» que los circundan
También sera aquel que propicie que esa comprensión les permita a todos internalizar la visión que comparten con el resto, así como trabajar con los modelos mentales de todos para comprenderlos, interpretarlos y empatizar con ellos para, finalmente, permitir la unicidad; esa que hará que todos se sientan involucrados.
La parte interesante del hecho de buscar ser una «Organización Inteligente» es que nunca se logra alcanzar. «Solo sé que no sé nada» fue declarado por el filósofo Sócrates hace 2.500 años y aún está vigente.
Aprender algo como las disciplinas marco de estas organizaciones, es un desafío de nunca acabar. Siempre estamos aprendiendo. Siempre aparecerá algo novedoso y algo nuevo por superar. Es como la evolución de la naturaleza: Un proceso eterno.
Gracias por tu tiempo.
Autor
Arnaldo González Graterol
Autor de la competencia Liderazgo de personas y equipos
en el libro Y eso, ¿cómo se come?
Excelente artículo, Arnaldo. La creación de Organizaciones Inteligentes exige un alto nivel de alineación y compromiso en torno a objetivos comunes, como bien mencionas. Lograr que cada miembro se sienta parte de una visión compartida y una red interconectada es clave para el éxito. La sinergia que se genera permite una mayor claridad y enfoque en cada actividad, optimizando el uso del tiempo y de los recursos. Como accountability partners, nuestra misión es guiar y apoyar en esta organización y alineación, asegurando que cada paso esté enfocado hacia las metas colectivas. ¡Gracias por compartir esta valiosa perspectiva!