A pesar de las brechas digitales en el aprendizaje a distancia, especialmente en los países menos desarrollados, que evidencian las dificultades en equipamiento, costos y aptitudes necesarias para avanzar con la educación digital, sigue siendo cada vez más la población mundial que se suma a la educación digital.
La Generación Z y la Generación Baby Boomer son las que más se resisten al cambio.
No es extraño que los más jóvenes, a pesar de ser nativos digitales, se resistan al aprendizaje virtual, pues se les ha impuesto la educación tradicional, sus necesidades sociales son mayores y su disposición a invertir en si mismos es baja.
Los mayores de 55 años, quienes apenas han experimentando con Zoom, WebinarJam o cualquiera de las tantas aplicaciones de videoconferencia que se han posicionado y crecido rápidamente post covid-19, afirman que "esto no es para mi".
Los retos para esta generación pasan por comprender la jerga tecnológica, desde "LOL" (de las siglas Laughing out loud) antiguamente conocido como "JAJAJA", hasta entender cómo mostrar la pizarra de clases o video beam en la cámara del ordenador.
¿La educación tradicional es mejor que la virtual?
Interactuar físicamente en el mismo espacio JAMÁS será sustituido por nada. Bueno, quizás en el futuro alguna tecnología desconocida la supere. Pero por los momentos no hay ninguna experiencia igual al aprendizaje presencial.
La ventaja de la educación virtual BIEN DISEÑADA, trae consigo la capacidad de conectar a los más talentosos profesionales de la industria de todo el planeta, para que difundan al mundo información realmente de valor. Esto es imposible replicarlo de otra manera.
La realidad es, que ninguna es mejor, son experiencias diferentes. Pero debemos entender que nuestra cultura apunta a una colaboración global y requiere de nuestra adaptación a la tecnología, especialmente en la industria de la educación.
Por los momentos, las carreras mejor posicionadas en la educación virtual, son aquellas que suman a la economía digital, tales como: programación y desarrollo de software, producción audiovisual, diseño y marketing digital.
Sin embargo son cada vez más las carreras técnicas, científicas y sanitarias que buscan incorporar parte de su programa de aprendizaje en el formato virtual.
Lo más inteligente y menos doloroso es no luchar contra la corriente, adaptarnos es la mejor manera de avanzar y crecer en conocimientos de calidad.
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Autor
Marelbis Pimentel
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